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Novena al Santo Cristo de Ourense

Día 29 de abril, viernes: quinto día de novena al Santo Cristo de Ourense.

JESÚS ANTE PILATOS

Introducción

En el ecuador de esta novena al Santo Cristo de Ourense contemplamos hoy la escena del Señor ante Pilatos. Cristo es presentado como un malhechor, que amotina al pueblo, se opone a los tributos del César y se erige en Mesías rey. Realmente todos saben la verdad, también Pilatos. Tantas veces Señor, también hoy, nosotros preferimos mirar para otro lado.

La primera carta de S. Juan nos recuerda que si Dios es luz y verdad, no podemos vivir en la oscuridad y en la mentira. Nos engañamos a nosotros mismos si decimos que no tenemos ningún pecado. Eso mismo creían judíos y romanos, nadie se creía culpable; incluso Barrabás es una opción preferible al mismo Cristo.

Los sabios y entendidos de este mundo, los que decidían el destino de los demás (gobernadores, sumos sacerdotes, jueces) se creen dueños del mismo Dios. Los poderosos, Señor, se creen con derecho a todo, a saberlo todo, a decidirlo todo y concluyen que mereces ser azotado, flagelado, condenado, crucificado. La única opción que les sacia es el derramamiento de sangre. Es Cristo ofrecido como víctima de expiación, por nuestros pecados y los del mundo entero.

Este misterio de la sangre redentora de Cristo que nos purifica únicamente se revela a los sencillos de corazón, solo ellos entienden la estrecha línea que separa el amor y el sufrimiento.

Hoy te pedimos, Señor, haznos descansar en tu regazo, alivia nuestras cargas y agobios, contigo a nuestro lado el yugo será llevadero.

“Por tu pasión y muerte de cruz, bendito Cristo de Ourense, ampáranos en la vida y en la muerte”. Pidamos al Santo Cristo de Ourense por nuestras intenciones y por las intenciones de toda la Iglesia.

Momento de silencio

Oración: Oh Dios – que quisiste – que tú amantísimo Hijo – sufriese por nosotros – el suplicio de la Cruz – para arrojar de nosotros – la tiranía del enemigo – concédenos a tus siervos – conseguir – la gracia de la resurrección. Por Cristo Nuestro Señor –  AMÉN .

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