A diocese de Ourense e a súa Catedral figuran xa nun lugar destacado na Basílica de San Martiño de Tours en Francia, onde repousan os restos do noso patrón e intercesor dende o século cuarto. Di así a inscrición gravada nunha das paredes do templo votivo:
Oración colecta
Oh Dios, que fuiste glorificado con la vida y la muerte de tu obispo san Martín de Tours, renueva en nuestros corazones las maravillas de tu gracia, para que ni la vida ni la muerte puedan apartarnos de tu amor. Por nuestro Señor Jesucristo.
Oración sobre las ofrendas
Santifica, Señor, los dones que te presentamos con gozo en la fiesta de san Martín; que ellos orienten nuestra vida en medio de los bienes y males de este mundo. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Antífona de comunión Mt 25, 40
Os aseguro que cada vez que lo hicisteis con uno de estos mis humildes hermanos, conmigo lo hicisteis —dice el Señor.
Oración después de la comunión
Concede, Señor, a los que has alimentado con el sacramento de la unidad, la aceptación perfecta de tu voluntad en todas las cosas, para que, así como san Martín se entregó por entero a tu servicio, también nosotros vivamos el gozo de ser verdaderamente tuyos. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Primera lectura:
Lectura del libro del profeta Isaías 61, 1-3a
El espíritu del Señor está sobre mí, porque el Señor me ha ungido. Él me envió a llevar la buena noticia a los pobres, a vendar los corazones heridos, a proclamar la liberación a los cautivos y la libertad a los prisioneros, a proclamar un año de gracia del Señor, un día de venganza para nuestro Dios; a consolar a todos los que están de duelo a cambiar su ceniza por una corona, su ropa de luto por el óleo de la alegría, y su abatimiento por un canto de alabanza.
Palabra de Dios.
SALMO Sal 88, 2-5. 21-22. 25. 27 (R.: cf. 2a)
R. ¡Cantaré eternamente tu misericordia, Señor!
Cantaré eternamente el amor del Señor,
proclamaré tu fidelidad por todas las generaciones.
Porque Tú has dicho: «Mi amor se mantendrá eternamente,
mi fidelidad está afianzada en el cielo». R.
Yo sellé una Alianza con mi elegido,
hice este juramento a David, mi servidor:
«Estableceré tu descendencia para siempre,
mantendré tu trono por todas las generaciones». R.
Encontré a David, mi servidor,
y lo ungí con el óleo sagrado,
para que mi mano esté siempre con él
y mi brazo lo haga poderoso. R.
Mi fidelidad y mi amor lo acompañarán,
su poder crecerá a causa de mi Nombre:
Él me dirá: «Tú eres mi padre,
mi Dios, mi Roca salvadora». R.
Segunda Lectura:
Lectura de la segunda carta del apóstol san Pablo a los cristianos de Corinto 5, 14-20
Hermanos:
El amor de Cristo nos apremia, al considerar que si uno solo murió por todos, entonces todos han muerto. Y él murió por todos, a fin de que los que viven no vivan más para sí mismos, sino para aquel que murió y resucitó por ellos. Por eso nosotros, de ahora en adelante, ya no conocemos a nadie con criterios puramente humanos; y si conocimos a Cristo de esa manera, ya no lo conocemos más así. El que vive en Cristo es una nueva criatura: lo antiguo ha desaparecido, un ser nuevo se ha hecho presente.
Y todo esto procede de Dios, que nos reconcilió con él por intermedio de Cristo y nos confió el ministerio de la reconciliación. Porque es Dios el que estaba en Cristo, reconciliando al mundo consigo, no teniendo en cuenta los pecados de los hombres, y confiándonos la palabra de la reconciliación.
Nosotros somos, entonces, embajadores de Cristo, y es Dios el que exhorta a los hombres por intermedio nuestro. Por eso, les suplicamos en nombre de Cristo: Dejémonos reconciliar con Dios.
Palabra de Dios.
ALELUIA Jn 13, 34abc
Aleluia. «Les doy un mandamiento nuevo: ámense unos a otros, como Yo los he amado», dice el Señor. Aleluia.
SANTO EVANGELIO
Mateo 25:31-
Cuando el Hijo del Hombre venga en su gloria, y todos los santos ángeles con él, entonces se sentará en su trono de gloria, y serán reunidas delante de él todas las naciones; y apartará los unos de los otros, como aparta el pastor las ovejas de los cabritos. Y pondrá las ovejas a su derecha, y los cabritos a su izquierda. Entonces el Rey dirá a los de su derecha: Venid, benditos de mi Padre, heredad el reino preparado para vosotros desde la fundación del mundo. Porque tuve hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y me disteis de beber; fui forastero, y me recogisteis; estuve desnudo, y me cubristeis; enfermo, y me visitasteis; en la cárcel, y vinisteis a mí.
Entonces los justos le responderán diciendo: Señor, ¿cuándo te vimos hambriento, y te sustentamos, o sediento, y te dimos de beber? ¿Y cuándo te vimos forastero, y te recogimos, o desnudo, y te cubrimos? ¿O cuándo te vimos enfermo, o en la cárcel, y vinimos a ti?
Y respondiendo el Rey, les dirá: De cierto os digo que en cuanto lo hicisteis a uno de estos mis hermanos más pequeños, a mí lo hicisteis.
Homilía en Tours de Francia
Introducción:
· Alegría por haber llegado a Tours, patria de San Martín.
· Acción de gracias y súplicas: por nuestra diócesis y catedral.
· Imitación en el cumplimiento del Evangelio.
También nosotros estamos llenos del Espíritu Santo: Isaías, 61, 1-3ª:
Gracias a San Martín de Tours:
· Llenos del Espíritu del Señor, porque Dios habita en nosotros.
· Nos envió a llevar la buena noticia a los pobres, a vendar los corazones heridos, a proclamar la liberación a los cautivos y la libertad a los prisioneros,
· A proclamar un año de gracia del Señor; a consolar a todos los que están de duelo; a cambiar su ropa de luto por la alegría, y su abatimiento por un canto de alabanza.
¿Por qué estamos hoy en Tours de Francia? Porque tenemos memoria:
La diócesis de Ourense peregrina a Tours de Francia hoy, día 22 de agosto, para conmemorar el 1700 aniversario del nacimiento de San Martín de Tours, patrono de la S. I. Catedral y de la diócesis de Ourense: “existe una narración de Gregorio de Tours (538-673), según la cual la conversión de los suevos se debió a un milagro de San Martín de Tours. El rey suevo Carriarico tenía un hijo llamado Mirón, gravemente enfermo y, habiéndole llegado a los oídos la fama de los milagros que hacía el santo de Tours, por la predicación de San Martín de Dumio, mandó preparar una embajada con obsequios de oro y plata para obtener la curación de su hijo. Algo que no consiguió. Carriarico pensó que esto se debía a la diversidad de religión, por lo que mandó edificar una iglesia en honor de San Martín de Tours. Envió una nueva embajada, pidiendo que le enviasen reliquias del santo y prometiendo aceptar todo lo que predicasen los sacerdotes. Llegaron las reliquias y el hijo del rey quedó milagrosamente curado y el monarca se convirtió con toda su grey”.
¿Cómo imitar a San Martín en el seguimiento de Cristo? Mateo, 25, 31-40
· Sólo hay un camino:
· «Venid, benditos de mi Padre, y recibid en herencia el Reino que os fue preparado desde el comienzo del mundo, porque tuve hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y me disteis de beber; era forastero, y me alojasteis; estaba desnudo, y me vestisteis; enfermo, y me visitasteis; preso y vinisteis a ver».
· Los justos le responderán: «Señor, ¿cuando te vimos hambriento, y te dimos de comer; sediento, y te dimos de beber? ¿Cuándo te vimos forastero, y te alojamos; desnudo, y te vestimos? ¿Cuándo te vimos enfermo o preso, y fuimos a verte?». Y el Rey les responderá: «Os aseguro que cada vez que lo hicisteis con el más pequeño de mis hermanos, lo hicisteis conmigo».
San Martín, Icono de misericordia: San Martín nos encamina a una vida comprometida: La leyenda más famosa en torno a su vida sucedería en el invierno de 337, cuando estando Martín en Amiens encuentra cerca de la puerta de la ciudad un mendigo tiritando de frío, a quien da la mitad de su capa, pues la otra mitad pertenece al ejército romano en que sirve. En la noche siguiente, Cristo se le aparece vestido con la media capa para agradecerle su gesto.
San Pablo nos invita a ser embajadores de Dios: Corintios, 5, 14-20
· Nos piden que vivíamos para aquel que murió y resucitó por nosotros.
· Nosotros somos embajadores de Cristo y tenemos que dejarnos reconciliar con Dios.
Evangelización:
La vida pastoral de San Martín se caracterizó por la evangelización de los pueblos por la cristianización de sus costumbres. Trabajó por desterrar el gnosticismo y el maniqueísmo de Prisciliano, pero siempre desde la caridad. Acudió ante el emperador Magno Clemente Máximo para evitar que Prisciliano fuera ejecutado, mientras que el obispo galaico Hidacio era favorable a la ejecución. Este insistió ante el emperador hasta que Prisciliano fue ejecutado en Tréveris.
Sínodo diocesano: que el ejemplo de San Martín nos ayude a vivir como hermanos, transmitiendo la fe, que de él hemos recibido.