Image-15

Oración por la Unidad de los Cristianos

Vigilia de Oración por la Unidad de los Cristianos

Ambientación de la celebración

Hemos visto salir su estrella y venimos a adorarlo”, así reza el lema de la Semana de Oración por la unidad de los cristianos de este año 2022. También nosotros, guiados por la estrella de nuestra fe y la preocupación por el gran escándalo de la división de los cristianos, venimos esta tarde a orar al Señor para que haga realidad el, tantas veces repetido, deseo de Jesús en la oración al Padre: “que todos sean uno”. Al comenzar esta celebración avivemos nuestra fe. Dios está presente en medio de nosotros, que nos reunimos en su nombre; démosle gracias y presentémosle a todos los enfermos, a los marginados, a los refugiados y desarraigados de sus hogares, a todos los que sufren por diversas causas, a los que nos han dejado por la pandemia del Covid 19 y de otras muchas pandemias… Lo hacemos con la certeza de que Dios puede disipar nuestras tinieblas con la luz de su Palabra, en estas vísperas del Domingo de la Palabra de Dios. Y. al orar hoy por la unidad pedimos al Señor que también nosotros y nuestras comunidades seamos estrellas que guíen a los demás hasta Jesús, el Salvador de todos. ]]>

OLYMPUS DIGITAL CAMERA

Octavario por la Unidad de los Cristianos

Octavario por la Unidad de los Cristianos

Mensaje de los Obispos

Los obispos comienzan su mensaje señalando que la Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos, “nos vuelve a interpelar, poniendo como un espejo ante nuestra vista la falta de unidad que nos aqueja, restando así significado a nuestra presencia en el mundo”. Y añaden, “el avance de la descristianización de Europa inquieta la conciencia de las Iglesias y Comunidades eclesiales, preocupadas por la pérdida de identidad cristiana del Occidente, cuya cultura y comprensión de la vida, del origen y destino del ser humano no podría entenderse sin la referencia de su propia historia al Evangelio”.

Los obispos reclaman volver a poner el foco en el mandato que Cristo confío a los apóstoles, anunciar el Evangelio, que es la razón de ser de la Iglesia. “La salvación –puntualizan- es el destino universal de todos los seres humanos; y para que la salvación alcance a todos es preciso darles a conocer la verdad que se le ha confiado a la Iglesia”.

En sintonía con el lema que se propone para este año, “hemos visto salir su estrella y venimos a adorarlo” ponen su esperanza en que la luz de Cristo “sigue alumbrando las oscuridades de las personas y de los pueblos, sin que se extinga el hambre de Dios”. La adoración de los Magos de Oriente, “proclama el carácter universal de la salvación que el Hijo de Dios vino a traer a la tierra, y esa universalidad mira tanto a los países de misión como a las sociedades de los países antes cristianos y hoy en la frontera del indiferentismo, donde tanto han disminuido las comunidades cristianas confesantes y de práctica religiosa”.

En referencia concreta al tema ecuménico, los obispos explican que este año «queremos poner el acento en el alcance universal del anuncio de la salvación en Cristo y, por tanto, en el carácter misionero de un ecumenismo que no pierda de vista el fin último de la evangelización«. Y puntualizan, «la nueva evangelización es tarea de todos, y la misión requiere hoy de las Iglesias y Comunidades un trabajo de conjunto

]]>

DSC_8536

Fiesta del Bautismo del Señor

Fiesta del Bautismo del Señor   Fiesta del Bautismo de Nuestro Señor Jesucristo, en el que maravillosamente es proclamado como Hijo de Dios, las aguas son santificadas, el hombre es purificado y se alegra toda la tierra (elog. del Martirologio Romano). Canto de entrada: Cfr. Mt. 3, 16-17. Apenas se bautizó el Señor, se abrieron los cielos y el Espíritu se posó sobre él como una paloma, y se oyó la voz del Padre que decía: «Este es mi Hijo amado, en quien me complazco». Oración colecta Dios todopoderoso y eterno, que en el bautismo de Cristo, en el Jordán, al enviar sobre él tu Espíritu Santo, quisiste revelar solemnemente a tu Hijo amado, concede a tus hijos de adopción, renacidos del agua y del Espíritu Santo, perseverar siempre empre en tu benevolencia. “Viene el que es más fuerte que yo; el os bautizará con Espíritu y fuego” (Lc.3, 16). “El presente Domingo nos presenta la cuarta epifanía del Señor; a ella han precedido la aparición del Jesús infante a los pastores, del Jesús adolescente en la fiesta de la Familia y anticipada litúrgicamente la de los Magos, el día 6; la fiesta de hoy sería la cuarta manifestación acontecida en el Bautismo. Nos lo acaba de decir San Lucas: en el momento de bautizarse bajó el Espíritu Santo sobre Él en forma de paloma y vino una voz del cielo que dijo: Éste es mi Hijo, el amado; en ti me complazco” (Lc 3, 22).]]>

Image

Solemnidad de la Epifanía del Señor

SOLEMNIDAD DE LA EPIFANÍA DEL SEÑOR

 Día 6 de enero

 Solemnidad de la Epifanía del Señor, en la que se recuerdan tres manifestaciones del gran Dios y Señor nuestro Jesucristo: en Belén, Jesús niño, al ser adorado por los magos; en el Jordán, bautizado por Juan, al ser ungido por el Espíritu Santo y llamado Hijo por Dios Padre; y en Caná de Galilea, donde manifestó su gloria transformando el agua en vino en unas bodas (elog. del Martirologio Romano). Oración colecta: Oh, Dios, que revelaste en este día tu Uni­génito a los pueblos gentiles por medio de una estrella, concédenos con bondad, a los que ya te conocemos por la fe, po­der contemplar la hermosura infinita de tu gloria.   Lectura del santo Evangelio según san Mateo: Mt.2, 1-12 Habiendo nacido Jesús en Belén de Judea en tiempos del rey Herodes, unos magos de Oriente se presentaron en Jerusalén preguntando: «¿Dónde está el Rey de los judíos que ha nacido? Porque hemos visto salir su estrella y venimos a adorarlo».     Las Fiestas del año litúrgico: Queridos hermanos: La gloria del Señor se ha manifestado y se continuará manifestando entre nosotros, hasta el día de su retorno glorioso. En la sucesión de las diversas fiestas y so­lemnidades del tiempo, recordamos y vivi­mos los misterios de la salvación. Centro de todo el año litúrgico es el Triduo pascual del Señor crucificado, sepultado y resucitado, que este año culminará en la noche santa de Pascua que, con gozo, cele­braremos el día 17 de abril. Cada domingo, Pascua semanal, la santa Iglesia hará presente este mismo aconte­cimiento, en el cual Cristo ha vencido al pecado y a la muerte. De la Pascua fluyen, como de su manantial, todos los demás días santos. El Miércoles de Ceniza, comienzo de la Cuaresma, que celebraremos el día 2 de marzo. La Ascensión del Señor, que este año será el 29 de mayo. El Domingo de Pentecostés, que este año coincidirá con el día 5 de junio. El primer domingo de Adviento, que cele­braremos el día 27 de noviembre. También en las fiestas de la Virgen María, Madre de Dios, de los apóstoles, de los santos, de san Martín de Tours el día 11 de noviembe, y en la conmemoración de todos los fieles difuntos, la Iglesia, peregrina en la tierra, proclama la Pascua de su Señor.

Galería de fotos:

 ]]>

Image-3

Domingo IIº de Navidad

Día 2 de enero

IIº domingo de Navidad

Celebrar Navidad es celebrar que Dios está con nosotros. ¡No estamos solos! Es la dicha sin límites de saber y sentir que Dios nos ama y se hace cercano. Podemos contemplar a Dios en el rostro del niño Jesús. Él es la pala­bra del Padre, expresión del Dios invisible en el mundo, desde siempre y para siempre. El evangelista Juan nos ofrece una profunda reflexión ante la humanidad del pesebre. La palabra es comunicación, expresión de la pro­pia interioridad al otro, y que pide respuesta. Dios nos enseña, en el pesebre, a hablar desde el silencio y la contemplación, porque creer es dejarse iluminar por su luz, y Él espera de los hombres un encuentro luminoso y un diálogo de corazón. Hoy Jesús sigue siendo palabra en la historia, para los que tienen abierto el sentido de la fe, para entrar en comunión con Él y participar de su filiación divina. También hoy viene a nuestra vida para plantar su tienda, que es hogar, cobijo y acogida para todos. Su palabra en nuestra vida es gracia y plenitud, y su voz nos llega desde la sencillez, la pobreza y el amor de las pequeñas cosas, en las actitudes humildes y los rostros amables. Dejemos que su luz colme de Vida nuestras vi­das, para que nosotros seamos testigos de su palabra. Que no nos acostumbremos al misterio. Canto (Misa Claret)

El Verbo hecho carne

En el principio existía el Verbo, y el Verbo estaba junto a Dios, y el Verbo era Dios. Él estaba en el principio junto a Dios. Por medio de él se hizo todo, y sin él no se hizo nada de cuanto se ha hecho. En él estaba la vida, y la vida era la luz de los hombres. Y la luz brilla en la tiniebla, y la tiniebla no lo recibió. Surgió un hombre enviado por Dios, que se llamaba Juan: este venía como testigo, para dar testimonio de la luz, para que todos creyeran por medio de él. No era él la luz, sino el que daba testimonio de la luz. El Verbo era la luz verdadera, que alumbra a todo hombre, viniendo al mundo. En el mundo estaba; | el mundo se hizo por medio de él, y el mundo no lo conoció. Vino a su casa, y los suyos no lo recibieron. Pero a cuantos lo recibieron, les dio poder de ser hijos de Dios, a los que creen en su nombre. Estos no han nacido de sangre, ni de deseo de carne, | ni de deseo de varón, sino que han nacido de Dios. Y el Verbo se hizo carne y habitó entre nosotros, y hemos contemplado su gloria: gloria como del Unigénito del Padre, lleno de gracia y de verdad.

Coro Aqua Musica:

]]>

DSC04051

Día 1 de enero: Santa María Madre de Dios

Solemnidad de santa María Madre de Dios.

Día 1 – I – 2022

¡Salve, Madre santa! Virgen, Madre del Rey que gobierna cielo y tierra por los siglos de los siglos

 

 Hoy es la fiesta de María Theotokos, que en griego significa “la que dio a luz a Dios”. Celebramos que es la Virgen y Madre de todos los hombres.

Una mujer que vivió, sufrió y murió con gran sencillez, sin triunfos ni milagros. Su mirada de Madre que acoge incondicionalmente, no juzga, perdona y ama siempre, es para nosotros un modelo de vida. Encomendémonos a ella, en este nuevo año que empezamos y pidámosle que ruegue por nosotros.

¡Que pronunciemos palabras amables y seamos constructores de paz. Que sepamos crecer en edad, sabiduría y gracia delante de Dios y d elos hombres!

Que “el Señor te bendiga y te proteja, ilumine su rostro sobre ti y te conceda su favor. El Señor te muestre su rostro y te conceda la paz” (Num.6, 22-27).

Galería de fotos:

  ]]>

IMG_20211223_113645

La Natividad del Señor

Feliz Navidad

25 – XII – 2021

Oh, Dios, que estableciste admirablemen­te la dignidad del hombre y la restauraste de modo aún más admirable, concédenos compartir la divinidad de aquel que se dignó participar de la condición humana.

Is.52, 7-10

Qué hermosos son sobre los montes los pies del mensajero que proclama la paz, que anuncia la buena noticia, que pregona la justicia, que dice a Sion: “Tu Dios rei­na!».

Heb.1, 1-6

En muchas ocasiones y de muchas mane­ras habló Dios antiguamente a los padres por los profetas. En esta etapa final, nos ha hablado por el Hijo, al que ha nombrado heredero de todo, y por medio del cual ha realizado los siglos.

Jn.1, 1-18

En el principio existía el Verbo, y el Verbo estaba junto a Dios, y el Verbo era Dios… Y el Verbo se hizo carne y habitó entre nosotros, y hemos contemplado su gloria: gloria como del Unigénito del Padre, lleno de gracia y verdad.

Galería de fotos:

]]>

IMG-20211213-WA0002

Santa Lucía

Santa Lucía Celebramos la memoria de santa Lucía Virgen y Mártir, quien, mientras vivió, conservó encendida la lámpara esperando al Esposo, y llevada al martirio en Siracusa, ciudad de Sicilia, en Italia, mereció entrar con él a las bodas y poseer la luz indefectible. Lucía es protectora contra los males de la vista.

Oh, Lucía  amada, 

que estás en el cielo,

Sé nuestro modelo

Y nuestra abogada

ORACIÓN: Que la poderosa intercesión de santa Lucía, virgen y mártir, sea nuestro apoyo, Señor, para que en la tierra celebremos su triunfo y en el cielo participemos de su gloria. Por Cristo Nuestro Señor. Amén.

 JACULATORIA:

Santa Lucía, virgen y mártir. Ruega por nosotros

]]>

IMG_8344

Bendición de los Belenes

DOMINGO 3º DE ADVIENTO

 12 – XII – 2021

BENDICIÓN DE LAS IMÁGENES DEL NIÑO JESÚS

El domingo tercero del tiempo de Adviento se llama domingo «Gaudete», «estad alegres», porque la antífona de entrada de la santa misa retoma una expresión de san Pablo en la carta a los Filipenses, que dice así: «Estad siempre alegres en el Señor; os lo repito: estad alegres».

La próxima Navidad nos recordará esta verdad fundamental de nuestra fe y, ante el belén, podremos gustar la alegría cristiana, contemplando en Jesús recién nacido el rostro de Dios que por amor se acercó a nosotros. A esta luz, es un verdadero placer renovar la hermosa tradición de la bendición de las imágenes del Niño Jesús que se pondrán en el belén.

 

Oración

Dios, Padre nuestro, tú has amado tanto a los hombres que nos has mandado a tu Hijo único, Jesús, nacido de la Virgen María, para salvarnos y guiarnos de nuevo a ti.

 Te pedimos que, con tu bendición, estas imágenes de Jesús, que está a punto de venir a nosotros, sean en nuestros hogares signo de tu presencia y de tu amor. Padre bueno, bendícenos también a nosotros, a nuestros padres, a nuestros hijos, a nuestras familias y a nuestros amigos.

 Abre nuestro corazón, para que recibamos a Jesús con alegría, para que hagamos siempre lo que él nos pide y lo veamos en todos los que necesitan nuestro amor.

 Te lo pedimos en nombre de Jesús, tu Hijo amado, que viene para dar al mundo la paz. Él vive y reina por los siglos de los siglos. Amén.

Rezo del Ángelus

Y ahora recemos juntos la oración del Ángelus, invocando la intercesión de María para que Jesús, que al nacer trae a los hombres la bendición de Dios, sea acogido con amor en todos los hogares del mundo. Papa Benedicto XVI, Ángelus del 14 de diciembre de 2008.

]]>

Image-5

Novena a la Purísima

VIRGEN INMACULADA

Novena breve

 

Ambientación histórico – artística:

La Inmaculada Concepción es un dogma de la Iglesia católica definido en el año 1854. Afirma que la Virgen María estuvo libre del pecado original desde el primer momento de su concepción en virtud de los méritos de su hijo Jesucristo. Pero, una vez más, el pueblo de Dios se anticipó a sus pastores distinguiendo a María con la advocación de la Inmaculada Concepción. En la Catedral de Ourense, en el año 1658, se encargó el primer retablo de la Inmaculada a Mateo de Prado, que se colocaría en la capilla central de la girola. De este retablo solo se conserva, maltrecha, una imagen en el museo catedralicio. En 1778, el Deán Antonio Francisco Salgado renovó el retablo y encargó una nueva imagen, una interesante talla de la escuela madrileña, atribuida con acierto al gran escultor Luis Salvador Carmona. La capilla de la Inmaculada se viste de azul y rosas para su novena y solemnidad, día ocho de diciembre. En el Museo de la Catedral se conserva también otra delicada imagen que, siguiendo los modelos de Gregorio Fernández, realizó Mateo de Prado para la hornacina alta del retablo de la Conversión de San Pablo. En la Sacristía estuvo, hoy en Santa María Madre, un magnífico cuadro de la Inmaculada firmado por el pintor madrileño Antonio Castrejón, siglo XVII. Por lo que se ve que la devoción a la Inmaculada Concepción estuvo, desde tiempo inmemorial, muy presente en la Catedral. Su fiesta se celebra el día 8 de diciembre.  

Himno mariano de la fiesta de la Purísima:

 Pureza inmaculada, espejo del Señor, ¡oh fuente de la gracia, unida al redentor!

Belleza sin mancilla, encanto virginal, tú eres la alegría, la gloria del mortal.

¡Oh vara florecida del tronco de Jesé!, en gracia concebida, ¡oh gloria de Israel!

Dichosa por los siglos los pueblos te dirán: tú fuiste del Dios vivo la aurora celestial. Amén.

 

Texto Bíblico: Lc. 1, 26 – 28:

En el mes sexto, el ángel Gabriel fue enviado por Dios a una ciudad de Galilea llamada Nazaret, a una virgen desposada con un hombre llamado José, de la casa de David; el nombre de la virgen era María. El ángel, entrando en su presencia, dijo: «Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo».

Comentario a la Palabra de Dios:

Felices los de corazón limpio, porque ellos verán a Dios (Mt. 5, 8). La alegría de María, tal como se lo explica el arcángel San Gabriel, brota de su plenitud de gracia, de la presencia de Dios en su corazón. El papa Francisco, en su exhortación apostólica Gaudete et Exultate (Alegraos y Regocijaos) en la que nos invita a ser santos, nos pide alegría y regocijo, desde un corazón limpio, puro, sencillo, sin suciedad.  ¿Por qué motivo? Porque del corazón nace lo que contamina al hombre (cf. 15,18), porque de allí proceden los asesinatos, el robo, los falsos testimonios, y demás cosas (cf. 15,19)

Oración de los fieles:

Oremos al Señor nuestro Dios, que eligió a María con vo­cación singular, bendita entre todas las mujeres.
  • Por la Iglesia universal: para que viva sin mancha ni arruga ni nada seme­jante, avanzando por el camino de la santidad. Roguemos al Señor.
  • Por los jóvenes y adolescentes: para que sigan, como María, la virtud de la pureza y vivan siempre alegres en el amor a Dios y al prójimo. Roguemos al Señor.
  • Por los enfermos y cuantos sufren en este valle de lágrimas: para que en­cuentren siempre en María el consuelo y la gracia que necesitan. Roguemos al Señor.
  • Por cuantos estamos aquí, celebrando con gozo el triunfo de Cristo en María: para que, como ella, seamos santos e irreprensibles por el amor. Roguemos al Señor.

Padre nuestro, Avemaría y gloria al Padre…

Oración final:

Te pedimos, Señor, que la Concepción Inmaculada de María, que hoy celebramos, sea fuente de bendición para todos. Por Jesucristo nuestro Señor.]]>