Vigilia de Adviento
Hermanos y hermanas: bienvenidos en esta tarde-noche a la Iglesia Catedral Basílica de San Martin. Hoy Jesús nos convoca para comenzar el tiempo de Adviento como Iglesia en Ourense, presididos por nuestro Obispo.
Dispongámonos, llenos de gozo, para vivir esta celebración y abrir el corazón para acoer el señor, que viene a nuestra casa, una vez más.
Con la confianza puesta en el Señor y gozosos por su próxima venida sigamos caminando juntos y llevemos la Buena Noticia a todos los corazones.
Participemos con alegría en esta celebración que comenzamos encendiendo la primera vela de la corona del Adviento.
Catedral de san Martiño
Ourense 2022
Vino a su casa y los suyos no lo recibieron
(Jn 1,11)
MONICIÓN INICIAL
Hermanos y hermanas: bienvenidos en esta tarde-noche a la Iglesia Catedral Basílica de San Martin. Hoy Jesús nos convoca para comenzar el tiempo de Adviento como Iglesia en Ourense, presididos por nuestro Obispo.
Dispongámonos, llenos de gozo, para vivir esta celebración y abrir el corazón para acoer el señor, que viene a nuestra casa, una vez más.
Con la confianza puesta en el Señor y gozosos por su próxima venida sigamos caminando juntos y llevemos la Buena Noticia a todos los corazones.
Participemos con alegría en esta celebración que comenzamos encendiendo la primera vela de la corona del Adviento.

¡MARANA THÁ! ¡VEN, SEÑOR, XESÚS!
¡MARANA THÁ! ¡VEN, SEÑOR, XESÚS!
Galería de Fotos:


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Día 6º de la novena: Lectura bíblica del sexto día: Hechos de los Apóstoles 1, 12-14 2Entonces se volvieron a Jerusalén, desde el monte que llaman de los Olivos, que dista de Jerusalén lo que se permite caminar en sábado. 13Cuando llegaron, subieron a la sala superior, donde se alojaban: Pedro y Juan y Santiago y Andrés, Felipe y Tomás, Bartolomé y Mateo, Santiago el de Alfeo y Simón el Zelotes y Judas el de Santiago. 14Todos ellos perseveraban unánimes en la oración, junto con algunas mujeres y María, la madre de Jesús, y con sus hermanos. Meditación: Toda comunidad debe tener una cabeza y un corazón: la comunidad cristiana tiene a Jesucristo como cabeza y a María como corazón. Si quieres que tu apostolado sea fecundo y que el cansancio no te venza, ponte siempre bajo la protección de María. Profundización Como marco «¡Oh María, sin pecado concebida, rogad por nosotros que recurrimos a Vos!». Y enseguida oyó una voz que recomendaba llevar la medalla y repetir a menudo aquella oración-jaculatoria, y prometía gracias especiales a los que así lo hiciesen. ¿Dejaremos nosotros de hacerlo? Sería imperdonable dejar de utilizar un medio tan fácil de aseguramos en todo momento el favor de la Santísima Virgen.]]>







